Vientos del pueblo me llevan,
vientos del pueblo me arrastran,
me esparcen el corazón
y me aventan la garganta.
vientos del pueblo me arrastran,
me esparcen el corazón
y me aventan la garganta.
Miguel Hernández
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La rueda del molino |
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El río |
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La fábrica de la luz |
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Una puerta |
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la cuesta abajo |
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La iglesia |
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La pasarela |
Lo sueño, lo entresueño, lo persigo.
Para su acceso no hay más que el recuerdo.
Faltan los ojos puros, la inocencia.
Faltan los pies pequeños.
La calle larga, de calzada roja,
de la casa dormida en el silencio,
está en aquel lugar, acaso idéntica,
bajo idéntico cielo.
La que entreveo no es la misma calle
y se esfumina y se me pierde, lejos.
Para su acceso no hay más que el recuerdo.
Faltan los ojos puros, la inocencia.
Faltan los pies pequeños.
La calle larga, de calzada roja,
de la casa dormida en el silencio,
está en aquel lugar, acaso idéntica,
bajo idéntico cielo.
La que entreveo no es la misma calle
y se esfumina y se me pierde, lejos.
Fotografías tomadas el mes de agosto en Castril
de vacaciones con la familia
y ensimismada por la belleza de sus paisajes
