Mira que le di vueltas las navidades pasadas a la hora de escribir la carta a los Reyes Magos.
Vueltas y vueltas.. escribía, borraba, esto sí....no, aquello...
Oí en la tele que este año la cosa pintaba un poco en plan pobre... que una Señora llamada Crisis (yo creo que era Cris, pero se equivocaron), se estaba encargando de que la gente recibiera pocos regalos, o ninguno.
Así que pensé, que en vez de poner muchas cosas, quizás fuera mejor poner sólo una, y así asegurarme de que un papel pequeño, dentro de un sobre minúsculo, pasaría inadvertido a los ojos de Doña Cris.. o quien sabe... igual de daba pena de dejar sin un solo regalo a una niña como yo.
Afiné la punta del lapiz una y mil veces e intenté seleccionar el regalo más bonito de todos... tarea harto dificil, no sabía en que lío me había metido... y por supuesto los días pasaron, no encontraba mi regalo "perfecto" y la carta nunca llegó a su destino.
Hace unos días supe por fin QUÉ era aquella cosa bonita que quería sobre todas las demás, y aún a sabiendas de que igual el pedido ya no colaba, mandé mi cartita.. y me senté a esperar mirando cada mañana al levantarme, la chimenea.
Creo que el año pasado fui, al menos, medianamente buena porque ayer recibí estas cosas taaaaaaaaaaaaaaaaaaaan bonitas
Una caja llena de flores, ¡sólo puede contener maravillas!
Mis libros de Puck, mis magdalenas, mi té de las 5....... ¡mis lanas!
y finalmente esta niña, con su moño de ideas del que sale la hebra para su labor (pero... si soy yo!)
Imaginaos cómo me quedé.........
Sin palabras.... el regalo más bonito, el más esperado y el que más me ha emocionado en muuuuuuuuuucho tiempo.
El año que viene hago lo mismo.
¿Quién decía que los Reyes Magos no existen?
Mi reina de este año se llama Macarena, ella es la realizadora de sueños, como el mío, y este es su blog, que adoro
Vestida de domingo
Macarena es ante todo una artista que, con sus trabajos impecables, reparte felicidad a mayores y niñas y a la que doy de nuevo las gracias con todo mi corazón.